
Carlos Cañas Fue el primero en exhibir arte abstracto de corte cubista en el país, por lo que muchos lo reconocieron como el Picasso salvadoreño. Su obra repasó el indigenismo, el paisajismo, el cubismo, el surrealismo y el expresionismo. En sus últimos trabajos hay una notable abstracción geométrica con la que marcó el regreso a sus orígenes. Su visión hacia el arte salvadoreño reclamaba mayor autenticidad y desmeritaba la postura burguesa, a la que describe como "llena de dilemas de cosas que no tienen ningún sentido figurado por los valores estéticos". Perteneció a la generación de artistas que sentaron las bases de la plástica nacional, relativizando lo académico y privilegiando lo idiosincrásico, en la que militaban Camilo Minero, Luis Ángel Salinas, Mario Escobar. “Todos en forma diferente buscábamos lo mismo: una pintura que fuera salvadoreña. ¿Con qué elementos? Los que fuesen, pero una cosa que tuviera el poder y la fuerza de ser de El Salvador”. D esde jo...